Por Paúl Mena Erazo (Ecuador)
A 3.200 metros de altura, en los páramos andinos de la provincia ecuatoriana de Tungurahua, en el centro del país, centenares de niños y jóvenes entrenan con la ilusión de algún día formar parte del plantel profesional del Mushuc Runa Sporting Club, el primer equipo de origen indígena que llega a la primera categoría B del fútbol de Ecuador.
El orgullo de Tungurahua
El Mushuc Runa -palabras quichuas que significan “Hombre Nuevo”- se inició hace 10 años en competencias barriales amateur. Hoy, el equipo administrado por dirigentes indígenas juega sus primeros partidos en una categoría profesional cuyo premio a fin de año es el ascenso a la serie A del fútbol ecuatoriano, donde figuran los equipos de mayor trayectoria del país.
“Para los pueblos indígenas esto significa algo histórico. Los indígenas no hemos tenido muchas oportunidades de practicar la actividad deportiva profesional por diferentes factores, entre ellos el que nuestros padres y abuelos no veían ningún provecho en el deporte. Pero hoy estamos dando los primeros pasos”, dice a BBC Mundo el presidente del club, Luis Alfonso Chango.
Leer el resto del artículo