Por Denis Iglesias.- Ser Miembro de la Orden del Imperio Británico (MBE, por sus siglas en inglés) está considerado como uno de los mayores reconocimientos del Reino Unido. En la lista de distinguidos están deportistas de diferentes ámbitos como Pelé, Bobby Charlton, Bradley Wiggins o Nigel Mansell. Pero el nombre que nadie verá en la lista será el de Howard Gayle, el primer futbolista negro del Liverpool que acaba de rechazar una condecoración que se otorga a británicos que han contribuido de forma notable en sus áreas. “Si lo acepto, mis antepasados se revolverían en sus tumbas por cómo el Imperio y el colonialismo les esclavizaron”, dijo nada más conocer la nominación.
Gayle es una de las cabezas visibles de la campaña Show Racism the Red Card (Muestra la tarjeta roja al racismo), que busca erradicar la xenofobia desde el fútbol formativo hasta el profesional, pasando por la grada. El trabajo al frente de esta iniciativa le hizo merecedor de optar a ser MBE, pero el exjugador no acepta el término ‘Imperio’. “Si quieren ser inclusivos y aceptar a gente negra del Reino Unido y de la Mancomunidad de Naciones, que le cambien el nombre”, subrayó.